1. Catering: No hay boda sin comida, por eso se trata de un
servicio fijo en cualquier boda. Lo que no está tan definido es como tiene que
ser esa comida, la duración, calidad, número de platos, servicios extra. Como
en muchos aspectos de una boda el límite lo pones tu, y puede ir desde 100€ por
comensal que es de lo más barato que se puede encontrar, hasta donde quieras
pagar. Algunas afamadas empresas de Catering, como la de “Samantha de España”
te proponen impresionantes menús más cerca de un restaurante con estrella
Michelín que lo que nos podemos esperar de una boda. Además hay que tener en
cuenta que además del habitual servicio, se pueden añadir extras como un
catering antes de la comida o cena, así como un servicio de pequeñas comidas
para horas después, muy habitual en bodas que se alargan por la noche.
2. Fotografía de Boda: Se trata de una de los servicios
imprescindibles en cualquier boda y que será uno de los mejores recuerdos que
se pueden tener. De nuevo el presupuesto para un video de boda o fotografía
puede ser desde unos 800€ hasta presupuestos multiplicados por 10. De nuevo
dependerá del número de cámaras que contrates, el reconocimiento de la empresa,
el número de horas y tomas que quieras contratar o los servicios que irán
incluidos, como puede ser el Photocall, un servicio de preboda o postboda, el
tipo de vídeo que requieras.
3. DJ: Cualquier boda que se precio, no puede dejar de tener un
animador que haya de maestro de ceremonia para esa primera y tan especial
canción, como para la diversión de las siguientes horas. De nuevo el precio en
este caso es muy dispar y puede ir desde el típico Dj, que te pondrá una
playlist de Spotify, hasta un Dj más o menos reconocido, no hace falta que sea
David Guetta, que puede tener una caché superior a las 4 cifras.
4. Emplazamiento: Se trata de una de las decisiones más
debatidas en cualquier boda. Existen multitud de emplazamientos, algunos de los
más habituales son los tradiciones salones de boda, pasando por los hoteles que
disponen de salas preparadas para este tipo de eventos o incluso las más
selectas fincas o casas de campo que nos
permiten una emplazamiento con más espacio y posibilidades de celebrar eventos
en el exterior. De nuevo el precio puede ser muy dispar ya que podemos
encontrar lugares que nos ceda algún familiar o amigo, con lo que saldrá
gratis, hasta las más exclusivas villas que nos puede hacernos sentirnos como
reyes, pero que nos cobraran también como tales.
5. Decoración: Cada vez es más habitual decorar los espacios en
que celebramos bodas, con motivos o recuerdos simbólicos e importantes para los
novios. Existen empresas especialistas en crear ese entorno que nos permita
redondear ese día tan especial. Como en
el resto de casos anteriores, el límite lo ponemos nosotros ya que las
posibilidades son casi infinitas así como el precio que queremos pagar. Así el
coche de bodas donde trasladarnos puede ser un coche clásico, uno de carreras o
una limusina. Pero también entra en este capítulo partidas como la iluminación,
los regalos para los invitados y un sin fin más de detalles.